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Según estudios sobre la materia, los trabajos que se realizan en el jardín son una saludable práctica que alimenta la autoestima, relaja y hace que la concentración mejore. El contacto con las plantas refuerza los lazos con la madre naturaleza y esto se transforma en equilibrio psíquico aumentando la calidad de vida de las personas.

Las virtudes de la jardinería

A aquellos que les gusta la jardinería, saben que a veces se tienen que enfrentar a trabajos muy delicados. Igualmente, hay otros que necesitan de la fuerza, por lo que ambos derivan en un refuerzo de las destrezas motrices.

Cuando se realiza un trabajo delicado con una planta, este provoca la tendencia a la meditación y a la concentración. Por un espacio de tiempo, la mente se libera de pensamientos no deseados y el cuerpo realiza un poco de ejercicio, beneficiando al organismo con momentos de paz y relajación.

Esta es una terapia muy utilizada en centros de rehabilitación, precisamente por sus beneficios para reducir el estrés y la ansiedad. Son trabajos que normalmente son asignados a personas con problemas de drogadicción, estando demostrado, que igualmente ayuda a personas con discapacidades ya sean físicas o psíquicas.

No se puede olvidar, que como ejercicio que es, hay que realizarlo de forma moderada y con las herramientas adecuadas para evitar posibles daños no deseados. De la misma forma, hay que tener en cuenta el sol, ya que al estar trabajando al aire libre, se puede llegar a estar expuestos durante un espacio de tiempo prolongado, con lo que el uso de sombrero y cremas protectoras es imprescindible.

Si miramos atrás y nos fijamos en cuando en los pueblos era normal cultivar la tierra con nuestras propias manos, nos daremos cuenta de que con ese tipo de vida, las personas vivían más y se sentían mejor con ellos mismos.